Riesgo financiero

Definición

El riesgo financiero es la probabilidad de ocurrencia de eventos financieros negativos.

Por lo general, hace referencia a la incertidumbre que produce la rentabilidad de una inversión dadas las variables no controlables por una empresa, tales como inflación, tipo de cambio, regulaciones gubernamentales, acciones de la competencia, entre otras.

En general, cuanto mayor sea la rentabilidad potencial de una inversión, mayor será su riesgo financiero asociado.

Tipos

Los riesgos financieros se clasifican en:

• Riesgo de mercado: aquel riesgo asociado a las operaciones de los mercados. A su vez, dentro de este tipo encontramos:
  • Riesgo de cambio: vinculado a la fluctuación del tipo de cambio de una moneda respecto a otra. Afecta fundamentalmente a las inversiones que implican un cambio de divisa.
  • Riesgo de tasa de interés: hace referencia al riesgo de que los tipos de interés suban o bajen en el momento menos conveniente para la inversión.
  • Riesgo de mercado: en su versión acotada se encuentra asociado al riesgo de que se produzcan pérdidas en la cartera de inversiones (acciones, bonos, deudas, derivados, etc.).
• Riesgo de crédito: tipo de riesgo que se produce cuando una de las partes de un contrato financiero no asume sus obligaciones de pago. Por ejemplo, al incumplir el pago de cuotas en un préstamo hipotecario.
• Riesgo de liquidez: ocurre cuando una de las partes contractuales tiene activos pero no cuenta con la liquidez suficiente para hacer frente a sus obligaciones. Cuando una empresa no puede hacer frente a sus obligaciones de corto plazo, se dice que se encuentra ante una situación de iliquidez.
• Riesgo operativo: sucede cuando existe la posibilidad de pérdidas financieras provenientes de procesos productivos ineficientes, tecnología operativa obsoleta u otros eventos imprevistos, relacionados con la operatoria habitual de la empresa.
• Riesgo país o soberano: se da a nivel nacional y representa el riesgo vinculado a las inversiones y financiaciones de un país respecto a otro. Este tipo de riesgo es importante para los inversores extranjeros al decidir colocar sus fondos, dado que está relacionado con la eventualidad de que un Estado se vea imposibilitado de cumplir con sus obligaciones con algún agente extranjero.

Gestión del riesgo

Entre las principales funciones del responsable financiero de una organización se encuentra la de analizar las posibilidades de inversión, supervisar el flujo de dinero, estudiar los activos que entran y salen de la empresa, y manejar y mitigar el riesgo utilizando recursos de la compañía.

Si bien la gestión del área financiera depende del perfil de su responsable, se pueden establecer algunos criterios generales en su proceder. Por ejemplo, suponiendo que la gerencia de producción requiere la adquisición de maquinaria para ampliar su capacidad productiva, se puede suponer que el responsable financiero actuará de la siguiente manera:

1. Identificación: el objetivo en este punto consiste en reconocer los riesgos involucrados en la compra de la maquinaria que podrían perjudicar a la compañía. Asimismo deberá determinarse el alcance y el contexto de las variables y actores implicados, para adaptar el proceso de gestión del riesgo.
2. Evaluación: comprende el proceso global del riesgo, es decir su análisis, ponderación, escenarios posibles y su valuación económica antes de tomar la decisión de avanzar con la inversión.
3. Plan de contingencias: deben preverse los planes de acción tendientes a disminuir las pérdidas que se generarán en la empresa, si las cosas salen mal (escenario pesimista).
4. Seguimiento: en caso de llevar adelante la adquisición, deberá realizarse un seguimiento para evitar desvíos que ocasionen riesgos en el plan establecido y que atenten con el resultado del proceso.