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Editorial Grudemi (2018). Pirámide de Maslow. Recuperado de Enciclopedia Iberoamericana (https://enciclopediaiberoamericana.com/piramide-de-maslow/). Última edición: julio 2018. Consultado el 27 de junio de 2024.
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Pirámide de Maslow

Teoría basada en la psicología de las necesidades.

Tabla de contenidos:

¿Qué es?

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La pirámide de Maslow, formulada por el psicólogo Abraham Maslow, es una teoría psicológica que ha sido fundamental para comprender las motivaciones y necesidades humanas. Este modelo propone que las personas buscan satisfacer una serie de necesidades en un orden específico, ascendiendo desde las más básicas hasta las más elevadas. En su base se encuentran las necesidades fisiológicas, como alimentación y refugio, seguidas por las necesidades de seguridad, que abarcan aspectos como la estabilidad financiera y la protección física.

A medida que estas necesidades fundamentales son satisfechas, las personas se mueven hacia niveles superiores de la pirámide. El tercer nivel incluye las necesidades sociales, relacionadas con la conexión interpersonal y la afiliación a grupos. Más arriba se ubican las necesidades de estima, que involucran el reconocimiento y la autovaloración. En la cúspide se encuentran las necesidades de autorrealización, representando el deseo de alcanzar el potencial máximo y la realización personal.

Fotografía de Abraham Maslow.

Fotografía de Abraham Maslow.

La teoría de la pirámide de Maslow fue propuesta por Abraham Maslow en su artículo «A Theory of Human Motivation», publicado por primera vez en 1943. A lo largo de las décadas, Maslow desarrolló y refinó esta teoría, que luego se presentó de manera más completa en su obra «Motivation and Personality», publicada en 1954. Desde entonces, la pirámide de Maslow ha influido significativamente en la psicología y ha sido aplicada en diversos campos para comprender las motivaciones humanas.

Los 5 niveles

A continuación se detallan los 5 niveles de la pirámide de Maslow, desde abajo hacia arriba.

Los 5 niveles de la pirámide de Maslow de acuerdo con la jerarquía de necesidades.

Los 5 niveles de la pirámide de Maslow de acuerdo con la jerarquía de necesidades.

Necesidades básicas o fisiológicas

En la base de la pirámide de Maslow se encuentran las necesidades fisiológicas, que constituyen el nivel más fundamental para la supervivencia humana. Estas necesidades están relacionadas con la búsqueda de recursos esenciales que mantienen el funcionamiento biológico del cuerpo. En primer lugar, se encuentra la necesidad de alimentos, que proporciona la energía necesaria para las funciones vitales.

Además, las necesidades fisiológicas incluyen la necesidad de aire y oxígeno para la respiración, así como la importancia del sueño y el descanso para la restauración física y mental. También se abarca la necesidad de refugio, que proporciona protección contra los elementos y contribuye a la sensación de seguridad. En este nivel, las personas están principalmente enfocadas en asegurar su supervivencia básica y satisfacer las demandas biológicas fundamentales.

Cuando estas necesidades fisiológicas se ven satisfechas, se establece una base sólida que permite a las personas dirigir su atención hacia niveles superiores de la pirámide, abordando necesidades de seguridad, relaciones sociales, estima y autorrealización. La jerarquía de Maslow refleja la progresión natural de las motivaciones humanas, donde la atención inicial se centra en la supervivencia antes de abordar aspiraciones más complejas y emocionales.

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Necesidades de seguridad

Una vez satisfechas las necesidades fisiológicas en el primer nivel de la pirámide de Maslow, las personas buscan asegurar su bienestar y estabilidad a través de la satisfacción de las necesidades de seguridad. Estas necesidades abarcan diversos aspectos que contribuyen a crear un entorno predecible y libre de amenazas, generando así una sensación de seguridad tanto física como emocional.

En el ámbito físico, las personas buscan seguridad personal, protección contra peligros externos y la garantía de que sus necesidades básicas no estarán amenazadas. Esto puede incluir la estabilidad en el empleo, la vivienda segura y la ausencia de riesgos físicos inmediatos. Además, las necesidades de seguridad abordan la necesidad de un entorno emocional estable, donde las personas buscan relaciones afectivas y seguras, libres de conflictos significativos.

En el segundo nivel, las personas también tienden a buscar la estabilidad financiera y la planificación para el futuro, ya que la incertidumbre económica puede representar una amenaza a su seguridad. Al satisfacer estas necesidades, las personas logran un sentido de orden y previsibilidad en sus vidas, allanando el camino para abordar niveles superiores de la pirámide, como las necesidades sociales y emocionales. La seguridad proporciona el cimiento necesario para el desarrollo y la búsqueda de formas más complejas de satisfacción personal.

Necesidades sociales

Una vez que las necesidades fisiológicas y de seguridad han sido atendidas, las personas avanzan al tercer nivel de la pirámide de Maslow: las necesidades sociales o de pertenencia. En este nivel, las personas buscan establecer y mantener relaciones significativas, desarrollar conexiones emocionales y formar parte de grupos sociales que les brinden un sentido de identidad y pertenencia.

Estas necesidades abarcan tanto relaciones interpersonales cercanas, como amistades y relaciones familiares, como la integración en comunidades más amplias. La aceptación social y el afecto se vuelven cruciales, ya que las personas buscan compartir experiencias, emociones y actividades con otros. La satisfacción de estas necesidades contribuye a fortalecer la salud mental y emocional, ya que el individuo se siente conectado y apoyado por aquellos que le rodean.

El tercer nivel también incluye el deseo de ser parte de algo más grande que uno mismo, ya sea a través de relaciones comunitarias, pertenencia a organizaciones sociales o participación en eventos sociales. Estas conexiones sociales no solo satisfacen la necesidad de pertenencia, sino que también aportan un sentido de propósito y significado a la vida. Al abordar estas necesidades, las personas avanzan hacia niveles superiores de la pirámide, buscando reconocimiento y estima en su entorno social.

Necesidades de reconocimiento

Una vez satisfechas las necesidades fisiológicas, de seguridad y sociales, las personas buscan el cuarto nivel de la pirámide de Maslow: las necesidades de estima o reconocimiento. En este nivel, la atención se centra en la valoración propia y el reconocimiento por parte de los demás. Las necesidades de estima se dividen en dos categorías: la estima hacia uno mismo (autoestima) y la estima por parte de los demás (reconocimiento social).

La autoestima implica la apreciación y respeto hacia uno mismo, el reconocimiento de logros personales y la confianza en las habilidades individuales. Las personas buscan sentirse competentes, capaces y dignas de respeto en sus propios ojos. Por otro lado, la estima por parte de los demás implica recibir reconocimiento, aprecio y aceptación de la sociedad. Logros externos, status social y el respeto de los demás contribuyen a la satisfacción de estas necesidades.

La búsqueda de estima impulsa a las personas a esforzarse por alcanzar metas y recibir reconocimiento por sus logros. Sin embargo, es importante destacar que la satisfacción de las necesidades de estima no es permanente y puede fluctuar a lo largo del tiempo. Una vez que estas necesidades son reconocidas, las personas pueden aspirar al nivel superior de la pirámide de Maslow: la autorrealización.

Autorrealización

En la cúspide de la pirámide de Maslow se encuentran las necesidades de autorrealización. Este quinto nivel implica la búsqueda del desarrollo personal y la realización plena del potencial individual. Las personas que han satisfecho las necesidades en los niveles anteriores y han logrado un sentido de autoestima buscan ahora cumplir con sus aspiraciones más elevadas y llevar a cabo su visión más profunda de sí mismas.

La autorrealización implica el crecimiento personal, la creatividad, la búsqueda de conocimiento y la expresión plena de las capacidades y talentos individuales. Las personas que se esfuerzan por alcanzar la autorrealización buscan contribuir significativamente a la sociedad, encontrar un propósito más allá de las necesidades personales y experimentar un profundo sentido de satisfacción interior.

Es importante destacar que la autorrealización es un proceso continuo y subjetivo, ya que cada persona define sus metas y aspiraciones de manera única. La consecución de la autorrealización implica estar en sintonía con los valores personales, explorar nuevas posibilidades y enfrentar desafíos para alcanzar un nivel más alto de autenticidad y plenitud en la vida. La pirámide de Maslow destaca que solo aquellos que han satisfecho los niveles anteriores pueden embarcarse en este viaje de autorrealización, convirtiéndolo en un aspecto significativo y transformador de la experiencia humana.

Críticas y controversias

A pesar de su influencia duradera y su popularidad, la pirámide de Maslow no está exenta de críticas y controversias. A continuación, se presentan algunas de las principales críticas que se han planteado respecto a esta teoría:

  • Universalidad: algunos críticos argumentan que la jerarquía propuesta por Maslow no es universal y puede variar culturalmente. Las prioridades y la importancia atribuida a ciertas necesidades pueden diferir entre individuos y comunidades, lo que cuestiona la aplicabilidad de la teoría en todos los contextos culturales.
  • Rigidez: otra crítica común es la percepción de que la jerarquía de Maslow es demasiado rígida y lineal. En la realidad, las personas a menudo experimentan y buscan satisfacer múltiples necesidades simultáneamente, y las transiciones entre niveles pueden no ser tan predecibles como sugiere la teoría.
  • Falta de evidencia empírica: algunos críticos señalan la falta de evidencia empírica sólida que respalde la jerarquía de necesidades de Maslow. Aunque la teoría ha sido influyente, la investigación científica ha encontrado dificultades para validar de manera consistente sus conceptos y principios.
  • Sesgo cultural: la teoría de Maslow refleja en gran medida perspectivas occidentales y puede no ser aplicable de la misma manera en todas las culturas. Las diferencias culturales en la valoración de la individualidad frente a la colectividad pueden afectar la relevancia y aplicabilidad de la pirámide.
  • Simplificación de la motivación humana: algunos críticos argumentan que la pirámide de Maslow simplifica en exceso la complejidad de la motivación humana al presentarla en una estructura jerárquica. La realidad de las motivaciones individuales puede ser mucho más intrincada y estar influenciada por factores contextuales y personales.
Bibliografía:
  • Schiffman León G., Lazar Kanuk Leslie. Comportamiento del consumidor. (Octava Edición) Editorial Pearson Prentice Hall.
  • 50 minutos.es. Pirámide de Maslow: Conozca las necesidades humanas para triunfar (Primera edición). 50 minutos.es. 2016.
  • Juan Rodulfo. ¿Por qué Maslow?: cómo usar su teoría para permanecer en el poder para siempre (Primera edición). Juan Rodulfo. 2018.

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