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Vocativo
Palabras que sirven para invocar o llamar la atención de una persona
Definición
Los vocativos son aquellas palabras que sirven para invocar o llamar la atención de una persona. Por ejemplo: Ordena tu habitación, Carlos.
Generalmente, los vocativos son complementos como nombres personales, sobrenombres o interjecciones con los que el hablante pretende llamar la atención del receptor.
Características
Algunas de las características más importantes de los vocativos son:
- Hace referencia directa a quién se dirige. Por ejemplo: No vuelvas a llamarme, Lucas.
- Cuando aparece al comienzo de un enunciado, va seguido por una coma. Por ejemplo: María, alcánzame el libro azul.
- Cuando aparece en medio de un enunciado, va escrito entre comas. Por ejemplo: Alcánzame, María, el libro azul.
- Cuando aparece al final de un enunciado, va precedido por una coma. Por ejemplo: Alcánzame el libro azul, María.
- De acuerdo al término utilizado como vocativo, se marca el grado de relación que tienen entre sí los interlocutores. Por ejemplo: Esta noche iremos al cine, mi amor. / Disculpe, señor, debe cruzar la calle por la esquina.
Ejemplos
- Queridos amigos
- Juana
- Che
- Profesora
- Daniel
- Vos
- Señora
- Vecino
- Señor
- Papá
- Abuelito
- Tú
- Señorita
- Raúl
- Profesor
- Querida
- Don José
- Mamá
- Compañeros
- Abuela
- Doña Paulina
- Mi cielo
- Flaca
- Chicos
- Doctora
- García
- Señor presidente
Oraciones con vocativos
- Quiero contarles algo importante, queridos amigos.
- Juana, tendrás que acompañar a mi hermana esta tarde.
- Che, deja de hablar tan fuerte.
- Profesora, queremos pedirle que nos explique otra vez el tema nuevo.
- La ropa, Daniel, debe doblarse prolijamente.
- Disculpe, señora, debe firmar este formulario.
- Vecino, ¿me prestarías una pala?
- Señor, no está permitido fumar dentro del bar.
- Te llamo mañana a la mañana, papá.
- Abuelito, ¿salimos a pasear?
- Tú, no vuelvas a hablarme así nunca más.
- Señorita, debe dirigirse a la oficina de al lado.
- Estoy preocupado, Raúl.
- Profesor, buen día.
- Es increíble, querida, todo lo que has logrado en estos meses.
- Don José, aquí le traigo su pedido del almacén.
- Mamá, llamó la tía para saludarte.
- Compañeros, debemos estar unidos en esta lucha.
- Este fin de semana vamos a visitarte, abuela.
- Buenas tardes, Doña Paulina, vine a tomar un tecito con usted.
- Apúrate, mi cielo, porque llegaremos tarde.
- Perdón, flaca, ¿podés decirme qué hora es?
- Atención, chicos, encontramos esta chaqueta en el patio.
- ¡Firuláis, tomá un poco de agua, vení!
- Ay, doctora, necesito que me calme estos dolores de cintura.
- Aquí está su credencial, García.
- Estamos reclamando dignamente por nuestros derechos, señor presidente.
Bibliografía: |
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Licenciada en Gestión Cultural (Universidad Nacional de Tres de Febrero). Docente de Lengua y Literatura. Escritora. Redactora.
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