Complemento directo

Definición

El complemento directo (CD) u objeto directo (OD) es el complemento más común de los verbos transitivos. Está constituido por una palabra (sustantivo, o proposición), construcción nominal o una proposición subordinada sustantiva.  Por ejemplo: Compramos una casa.

Se relaciona directamente con el verbo e indica algo acerca del sujeto del verbo. Por ejemplo, en la oración «Juan come una manzana», «manzana» es el complemento directo ya que indica lo que Juan está comiendo. Otro ejemplo es «Ella escribió una carta» en donde «carta» es el complemento directo.

¿Cómo se identifica?

El complemento directo se identifica por características específicas o formas de reconocerlo:

• Por regla no lleva preposición al inicio si son objetos inanimados. Por ejemplo: Tomaron mates / Julio pintó las rejas.
• Puede estar precedido por la preposición a, si se trata de una persona o ser animado. Por ejemplo: Visitó a sus abuelos.
• Es posible que sea reemplazado por los pronombres lo, la, los, las. . Por ejemplo: Milagros compró una biblioteca nueva. Milagros la compró.
• El pronombre lo, la, los, las funcionan como CD. Por ejemplo: Los dejé en la mesa.
• Puede ser sustituído por el pronombre eso, si se le pregunta al verbo. Por ejemplo: Elisa le dijo que no viajara. / Elisa dijo eso.

Ejemplos

• Miró la película en el cine.
• Preparó la cena.
• Lo pensó pero no dijo que pensaba quedarse.
• Quieren construir un edificio en el baldío de la esquina.
• La consiguió en el centro.
• Lavaré la ropa el sábado, por suerte saldrá el sol.
• Para su casamiento le regalamos un viaje.
• Juana quiere libros nuevos para su cumpleaños.
• Ella las invitó el fin de semana.
• Le pagaron la consulta al veterinario.

Ejemplos en textos

“Usted haga lo que le parezca.

El hombre se decidió: dejó el esmalte, tomó el dinero y se puso a redactar un recibo, por indicación del anticuario.

Mientras tanto, yo miraba algunos de los objetos, entre ellos una caja de música antigua con cinco muñecos músicos que se movían y dos bailarinas que se deslizaban por un alambre.

-Es bonito eso -le dije al amo-.

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-No le he puesto precio. No lo vendo. Está como muestra de la casa.”

Fragmento de “La caja de música” de Pío Baroja

“Una hilera de bombillas desnudas, desprovistas del menor asomo de tibieza, iluminaba el pequeño andén azotado por el viento. Había llovido esa tarde, y en el edificio de la estación los carámbanos colgaban del alero como los malignos dientes de algún monstruo de cristal. El andén estaba desierto a excepción de una muchacha, joven y más bien alta, que llevaba un traje de franela gris, un impermeable y una bufanda de cuadros escoceses.

…

El tren emergió de la oscuridad, arrojando vapor deslumbrante de luz, y se detuvo en el andén. Kay reunió su parafernalia y subió al último vagón.”

Fragmento de “Un árbol de noche” de Truman Capote