Guernica

Definición

El Guernica es una pintura de grandes dimensiones que el artista español Pablo Picasso pintó para el Pabellón de la República española en la Exposición internacional de París de 1937.

A principios de ese año, el director general de Bellas Artes de la Segunda República española, Josep Renau, comisionó la obra para la exposición. Picasso dudó durante un tiempo sobre el tema que debía tratar su pintura hasta que los bombardeos de la ciudad vasca de Gernika en el marco de la Guerra civil española, el 26 de abril de 1937, lo decidieron trabajar con ese tema. Al hacerlo, el artista dio relevancia de hecho histórico a un acontecimiento del presente. Sin embargo, no hay en la obra referencias específicas a ese bombardeo. De ese modo, la pintura se transformó en un alegato genérico contra la guerra y en un símbolo político de la violencia contra la población civil.

Picasso realizó la pintura, además de numerosos estudios y bocetos, en muy poco tiempo, entre mayo y junio de ese año. Todo el proceso fue documentado por la fotógrafa Dora Maar, que era su pareja de ese momento. Por lo tanto, es una de las obras más documentadas de la historia del arte.

Características

Entre las características del Guernica, se pueden mencionar las siguientes.

• La pintura fue concebida como un mural que se integrara a la arquitectura del pabellón y a las demás obras exhibidas.
• El proceso creativo fue muy dinámico. Además de la gran cantidad de estudios y bocetos previos, Picasso realizó numerosos cambios sobre la tela a medida que avanzaba en la pintura. Esos cambios fueron documentados por las fotografías de Dora Maar, así como por los estudios realizados en los últimos años por el museo Reina Sofía.
• La pintura se constituyó en un símbolo de la Guerra civil española y en un ícono de los reclamos por la paz en distintos conflictos. Sobre todo, a partir del uso de su imagen en las protestas contra la Guerra de Vietnam en los Estados Unidos de América.
• Además del valor simbólico, el Guernica, tiene un extraordinario valor artístico por su lenguaje pictórico novedoso que cerró el ciclo de las vanguardias del siglo XX e inició los numerosos debates que caracterizaron la escena del arte a partir de la década de 1940.
• Se han realizado numerosas apropiaciones y réplicas del cuadro, desde las anónimas en murales de distintas ciudades del mundo, hasta las autorizadas por el mismo Picasso que permitieron que la imagen fuera reconocida a nivel mundial. La más famosa es tal vez la realizada como tapiz para Nelson Rockefeller en la década de 1950.

Análisis

El Guernica es un lienzo de grandes dimensiones que desarrolla, en una paleta monocromática, una escena alegórica del bombardeo que las fuerzas militares de Alemania e Italia realizaron sobre la ciudad vasca de Gernika en apoyo de los nacionalistas españoles.

La obra representa el momento inmediatamente posterior al bombardeo. En un espacio confuso, que es un interior y un exterior al mismo tiempo, se ubican los personajes: tres animales (un toro, un caballo herido y un ave) y varias personas: un soldado muerto; una mujer con su hijo muerto en brazos; otra que ingresa en la escena por la derecha; una tercera que levanta los brazos en una casa en llamas y otra, finalmente, que se asoma por la ventana con un farol en la mano. Una lámpara con forma de ojo ilumina la escena.

El uso de una paleta limitada al blanco, negro y escala de grises refuerza la intensidad de la iconografía y contribuye al dramatismo del tema.

Picasso empleó un lenguaje pictórico novedoso derivado de sus investigaciones previas ligadas al vanguardismo, pero planteó una composición piramidal clásica y, siguiendo la tradición de la pintura desde el Renacimiento, ordenó los elementos con formas geométricas que dividen la superficie pictórica en triángulos de luces y sombras.

La construcción de una imagen cargada de significado, en la que cada elemento representado tiene un contenido simbólico; su composición clásica, y sus referencias visuales pueden rastrearse en la historia de la pintura y en artistas como Eugène Delacroix, Pedro Pablo Rubens, Jacques-Louis David o Francisco de Goya, entre otros y hacen del Guernica, una obra continuadora de la tradición artística occidental a pesar de su novedoso lenguaje.

Historia

El Guernica se presentó al público en el pabellón español de la Exposición Universal de París de 1937. Se expuso en un lugar abierto pero techado, entre el interior y el exterior del pabellón, repitiendo con su ubicación, la ambigüedad espacial de la pintura.

Enfrente se ubicaba un homenaje a la memoria del poeta Federico García Lorca, asesinado por los nacionalistas el año anterior, donde se vendían las estampas de la serie Sueño y mentira de Franco del mismo Pablo Picasso.

En 1939, el Guernica viajó a Nueva York para la muestra Picasso: forty years of his art que se realizó en el Museum of Modern Art (MoMA). En este contexto, al declararse la Segunda Guerra Mundial, Picasso decidió que la obra permaneciera en ese museo en resguardo y que fuera devuelta a España cuando se reestablecieran las libertades públicas.

Esto sucedió finalmente en septiembre de 1981. En ese momento, se instaló en un edificio anexo al Museo del Prado, el Casón del Buen Retiro, como una tácita continuación de los máximos referentes del arte español: Diego de Velázquez y Francisco de Goya.

En 1992, pasó al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía junto con todas las obras asociadas, como bocetos, fotografías e imágenes relacionadas posteriores.