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Marcelo Néstor Musa (2023). Batalla de Inglaterra. Recuperado de Enciclopedia Iberoamericana (https://enciclopediaiberoamericana.com/batalla-de-inglaterra/). Última edición: abril 2024. Consultado el 30 de abril de 2024.
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Contenidos

Batalla de Inglaterra

Serie de combates aéreos librados sobre el canal de la Mancha y las islas británicas entre julio y octubre de 1940.

Tabla de contenidos:

¿Qué fue?

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Se conoce con el nombre de batalla de Inglaterra al conjunto de combates aéreos librados sobre el canal de la Mancha y las islas británicas entre julio y octubre de 1940.

Las hostilidades fueron iniciadas por la Alemania nazi, que buscó destruir a la Real Fuerza Aérea (RAF), con el fin de lograr la superioridad aérea necesaria para invadir Gran Bretaña desde las costas de Francia.

Después de duros combates aéreos y de cientos de bombardeos sobre Londres y otras ciudades, los alemanes no lograron prevalecer, lo que impidió que invadieran las islas. De esa manera, la batalla de Inglaterra se transformó en la primera gran derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial.

Contexto histórico

Luego de la evacuación del ejército anglo-francés de las playas de Dunkerque (26 de mayo de 1940) y la capitulación de Francia (22 de junio), Adolf Hitler se propuso invadir las islas británicas para derrotar al único enemigo que aun le ofrecía resistencia: el Reino Unido.

Confirmada la alianza germano-soviética y dada la neutralidad de los Estados Unidos, Gran Bretaña se encontraba completamente aislada, ya que los submarinos alemanes atacaban los barcos de suministros procedentes de sus colonias y del continente americano.

A pesar todas esas contrariedades, el gobierno del primer ministro británico Winston Churchill se negó a rendirse y se dispuso a movilizar a su país para enfrentar la inminente invasión nazi.

Si bien el Ejército británico había quedado muy debilitado tras la desastrosa campaña en Francia, los británicos aun contaban con la Marina Real, que seguía siendo la más grande y poderosa del mundo.

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Ese poderío hizo comprender a Hitler que una operación anfibia través del Canal de la Mancha estaba condenada al fracaso si no contaba con el dominio de los cielos. Por esa razón, encargó al comandante de la Luftwaffe, Hermann Göring, la destrucción de la Fuerza Aérea británica, sus pistas de aterrizaje y depósitos de combustible.

El plan parecía factible ya que los alemanes contaban con tres grandes flotas de aviones que sumaban unos 3.500 aparatos, frente a los 1.300 que tenían los británicos. A esto hay que agregarle que los pilotos alemanes tenían más experiencia en combate que sus pares británicos.

En principio, las probabilidades de que la RAF pudiese ganar la batalla en el aire parecían ser muy escasas y alentaron las expectativas de éxito de los alemanes.

Desarrollo

La batalla aérea por el control de los cielos de las islas británicas comenzó el 10 de julio de 1940 y se convirtió en una de las más agotadoras de toda la Segunda Guerra Mundial.

Durante julio y agosto, los alemanes lanzaron varias oleadas diarias de bombardeos destinados a destruir aeródromos, fábricas de material aeronáutico y toda la infraestructura terrestre. Los ataques fueron protagonizados por aviones bombardeos Heinkel He 111, Junker Ju 88 y Dornier Do 17, que iban fuertemente escoltados por aviones caza, como el Messerschmitt Bf 109.

Para contrarrestar esos ataques, los británicos contaron con un avión caza ligero y de gran maniobrabilidad, el Supermarine Spitfire, y una red de radares integrada por antenas de 100 metros de altura, situadas a lo largo de las costas sur y este de Gran Bretaña. Esas instalaciones podían detectar aviones a una distancia de hasta 190 kilómetros. Una vez establecida la ubicación exacta de los escuadrones invasores, el centro de operaciones británico lanzaba cazas en el número y el momento precisos para derribar a los bombarderos de la Luftwaffe antes de que pudieran lanzar sus bombas.

Londres devastada por los bombardeos alemanes de 1940.

Londres devastada por los bombardeos alemanes de 1940.

A fines de agosto los alemanes bombardearon por error parte del casco urbano de Londres. Luego de un contraataque británico sobre Hannover y Berlín, los alemanes comenzaron a lanzar ataques nocturnos sobre objetivos civiles en diversas ciudades. Durante esos ataques, cuyo objetivo era aterrorizar a la población, Londres llegó a ser bombardeada durante 57 noches consecutivas. También Coventry, Birmingham, Bristol y Liverpool sufrieron demoledores ataques aéreos.

En total, los alemanes lanzaron unas 200.000 toneladas de bombas sobre Gran Bretaña, provocando unos 45.000 muertos, pero no lograron obtener el dominio de los cielos.

En octubre, Hitler, impresionado por las pérdidas de más de 1800 aviones y una cantidad similar de pilotos, comprendió que su plan había fracasado. A partir de entonces, los alemanes reemplazaron los ataques masivos por bombardeos nocturnos que aprovechaban la oscuridad para evitar la lucha contra la aviación británica.

Causas y consecuencias

Causas

Entre las principales causas de la batalla de Inglaterra sobresalen:

  • La ocupación de Bélgica, Luxemburgo, Francia y los Países Bajos por el ejército alemán durante mayo y junio de 1940.
  • La evacuación del ejército anglo británico desde el puerto de Dunkerque hasta las islas británicas.
  • La decisión de Hitler de invadir las islas británicas para cerrar el frente occidental antes de lanzar un gran ataque contra la Unión Soviética.
  • La firme decisión del gobierno británico de no negociar y de resistir con “sangre, sudor y lágrimas” el embate de los alemanes.
  • El apoyo dado a los británicos por el presidente de los Estados Unidos, Franklin Delano Roosevelt, a pesar de la política aislacionista del Senado y la Cámara de Representantes de su país.

Consecuencias

Las principales consecuencias de la batalla de Inglaterra fueron las siguientes:

  • Gran Bretaña se salvó de ser invadida por los alemanes y fue utilizada por los Aliados como lugar de entrenamiento de las tropas que en 1944 se lanzaron a la invasión de Europa continental a través de las costas de Normandía.
  • La Luftwaffe perdió casi la mitad de sus aviones al tiempo que Göring quedó desprestigiado frente a Hitler y el alto mando alemán.
  • Hitler debió resignarse a no poder cerrar el frente occidental y a tener que convivir con una Gran Bretaña desde la cual los Aliados podían bombardear el territorio alemán. Al decidir invadir la Unión Soviética, en 1941, Alemania se expuso a pelear la guerra en dos frentes simultáneos, estrategia que el propio Hitler había criticado al repasar las causas de la derrota germana en la Primera Guerra Mundial.
Bibliografía:
  • Bungay, Stephen. La batalla de Inglaterra. Barcelona, Ariel, 2008.
  • Clark, Ronald W. La batalla de Inglaterra. Barcelona, Juventud, 1981,
  • Korda, Michael. Con alas de águila: una historia de la Batalla de Inglaterra. Madrid, Siglo XXI Editores, 2010.

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Acerca del autor:

Profesor en Enseñanza Media y Superior en Historia (Universidad de Buenos Aires). Autor, editor y coordinador de contenidos editoriales.

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Marcelo Néstor Musa (2023). Batalla de Inglaterra. Recuperado de Enciclopedia Iberoamericana (https://enciclopediaiberoamericana.com/batalla-de-inglaterra/). Última edición: abril 2024. Consultado el 30 de abril de 2024.
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