Plantas vasculares

Definición

Las plantas vasculares, o Traqueofitas, son en líneas generales, «las plantas», es decir organismos fotosintéticos, macroscópicos e inmóviles que incluyen desde las sequoias hasta el trébol. Sin embargo, su clasificación y caracterización no es tan simple, pues como todos los grupos de organismos vivos, está lleno de excepciones.

Las plantas vasculares pertenecen al Reino Plantae que se encuentra dividido en dos subreinos: Viridipalntae (plantas verdes), en que están las plantas vasculares (Traqueofitas) junto con las algas verdes (Clorofita) y los musgos (Briofita), y Bilifita en el que se ubican dos grupos de algas: las Rodofita (algas rojas) y las Glaucofita.

Desde los comienzos de la humanidad las plantas tuvieron usos múltiples, principalmente como alimento, pero también se destacaron sus cualidades medicinales, ornamentales, recreativas, etc.

Características

En líneas generales las plantas vasculares comparten las siguientes características principales:

• Son multicelulares.
• Fotosintéticas.
• Sus pigmentos fotosintéticos son: clorofila a y b, β-caroteno, neoxantina, violaxantina, anteraxantina, luteína, zeaxantina y cis-luteína.
• Poseen órganos reproductores multicelulares.
• Poseen estructuras no fotosintéticas como las raíces.
• Tienen alternancia de generaciones, es decir entre estructuras haploides y diploides, llamadas gametofitos y esporofitos respectivamente.
• El esporofito es el cuerpo que más perdura en el ciclo de vida.
• Poseen células con paredes celulares de celulosa.
• Poseen tejidos bien desarrollados que transportan fluidos dentro del individuo.

Estructura

Las plantas vasculares están organizadas con sistemas de órganos y tejidos que cumplen distintas funciones. El desarrollo de estas características ha permitido a las plantas vasculares sobrevivir en hábitats sumamente diferentes, incluyendo algunas de las regiones más áridas del planeta.

Raíz

• Artículo principal: Raíz.

Son principalmente las estructuras de absorción de agua y nutrientes y de acumulación de las sustancias de reserva que se producen en la fotosíntesis. Las raíces de las plantas no son órganos fotosintéticos y en general son subterráneas. La otra función que cumplen estas estructuras es la de fijar las plantas al suelo y recíprocamente, favorecen la fijación de los suelos evitando los desprendimientos y aludes por erosión.

Hay tres tipos de raíces: Las primarias y las secundarias están en todas las plantas vasculares, las primeras son más gruesas y leñosas, en tanto que las segundas son delicados pelos que se extienden a los lados de las raíces primarias incrementando así la superficie de absorción. El tercer tipo se encuentra en algunas plantas, como el gomero (Ficus elastica) y son aéreas, también llamadas adventicias, pero cumplen funciones similares a las otras dos.

El sistema radicular general es tan complejo que forma una capa del planeta llamada rizósfera. Allí habita un sinnúmero de microorganismos que realiza todo tipo de tareas fundamentales para sostener la vida en el planeta, algunos son degradadores, otros tienen un rol fundamental en la absorción de nutrientes por parte de las plantas y aún en la transferencia de los mismos entre plantas, es decir que cumplen un papel fundamental en la comunicación entre plantas.

Tallos

• Artículo principal: Tallo.

Son estructuras generalmente aéreas características de las plantas vasculares. Sus funciones principales son las de transporte de agua y nutrientes y sostén. Pueden ser fotosintéticos como los de las hortalizas y pasturas, o leñosos, como los de los árboles y arbustos.

El transporte se realiza a través del sistema vascular que da origen a la clasificación de este grupo de plantas. El agua y los nutrientes minerales circulan desde la raíz hacia las hojas a través del xilema, y a su vez, los productos de la fotosíntesis en el sentido inverso a través del floema. Por otra parte, el xilema posee células que contienen lignina, un compuesto orgánico que sirve para dar fuerza y soporte a la planta erecta.

Hojas

• Artículo principal: Hojas.

Son las estructuras donde se ubica el aparato fotosintético, es decir que allí sucede la fotosíntesis, pero también son las responsables de que el agua circule a través del xilema para que la fotosíntesis pueda ocurrir. Esta circulación de agua es a través de células especializadas llamadas estomas que funcionan como compuertas. Al abrirse permiten el intercambio gaseoso que se da entre O₂ y CO₂ y a su vez dejan salir una molécula de agua, ese fenómeno da lugar a que toda la columna de agua deba desplazarse hacia arriba por tensión superficial, generando la circulación mencionada.

Las hojas se encuentran en los tallos de las plantas, pueden tener diversas disposiciones y morfologías que varían con las especies, pero todas contienen los pigmentos fotosintéticos que pueden variar entre momentos del ciclo de vida. Si bien el predominante es la clorofila, y eso hace que la mayoría de las hojas se vea verde, en general todas las especies tienen un conjunto de pigmentos ya que, al absorber luz en diferentes longitudes de onda, les permite ampliar el espectro lumínico utilizable para la fotosíntesis.

Flor

Son los órganos reproductivos de las plantas vasculares con semilla. Son las responsables de la reproducción sexual. En la mayoría de las plantas con flor, allí coexisten los aparatos reproductores femenino y masculino (dioicas), sin embargo, en algunas plantas esto sucede en flores e incluso plantas separadas (monoicas). El aparato reproductor masculino está compuesto por los estambres, que son estructuras en las que se produce el polen, gameta masculina. El aparato reproductor femenino se compone del estigma, el estilo y el ovario en éste último se encuentran los óvulos, que son la gameta femenina.

La forma y pigmentación de las flores se relaciona con el sistema de fecundación y dispersión de semillas. Así existen las que son fecundadas por el viento (anemófilas), el agua, aves, o por distintos tipos de insectos (entomófilas). En este último caso, resultan de importancia los pigmentos de las flores, ya que son una característica fundamental en la percepción de los insectos. También se relaciona con la polinización a través de otros seres vivos la capacidad de generar sustancias aromáticas que puedan atraer a diferentes organismos.

Semilla

Son los óvulos fecundados maduros. Son una estructura diploide, es decir, que contiene todo el material genético. Las semillas además del germen, que es embrión de la nueva planta, poseen sustancias de reserva que son las que utilizará dicho embrión para germinar antes de comenzar a hacer fotosíntesis. Además, las semillas poseen adaptaciones que les permiten resistir a períodos y zonas desfavorables y germinar cuando las condiciones son propicias. Ejemplos de estas adaptaciones son cubiertas resistentes a la radiación UV y la desecación.

Las semillas pueden ser desnudas, es decir que no se encuentran dentro de un fruto o estar en él. En el primer caso, esas plantas se denominan gimnospermas y en el segundo caso, angiospermas. Las gimnospermas son más primitivas que las angiospermas. Ejemplo de ese grupo de plantas son las coníferas. Las angiospermas, por su parte, han prosperado exitosamente y hoy la gran mayoría de las plantas vasculares, pertenece a ese grupo. Dentro de las angiospermas, a su vez existe otra subdivisión que es monocotiledóneas si al germinar surge sólo un folíolo (cotiledón) y dicotiledóneas si germinan dos cotiledones.

Fruto

En las angiospermas es el crecimiento del ovario, luego de la fecundación y puede contener una o varias semillas. En líneas generales los frutos son una forma de dispersión de las semillas y poseen diferentes adaptaciones para ello.

Están los frutos adaptados a la dispersión por viento, por animales, autodispersión, etc. La clasificación de los frutos es compleja y existen varias formas que tienen que ver con la placentación, con la forma de liberación de semillas, con la formación, etc.

Ejemplos

Algunos ejemplos de plantas vasculares pueden ser: